FUENTE: Sportlife

La función de la vejiga es almacenar la orina hasta que la persona va al baño. Aunque es flexible, no debemos prolongar el tiempo cuando tenemos ganas. ¿Y sabes cuánta capacidad retiene? Se estima que una vejiga adulta sana puede acumular en torno a dos vasos de este líquido. Esta puede estirarse para guardar aún mayor cantidad, aunque esto es exactamente lo que no se aconseja: postergar el momento de hacer pis. Normalmente se recomienda ir al baño cada dos o tres horas. Como regla general... Cada persona es diferente y se tendría que tener en cuenta: los hábitos alimenticios ingesta de líquidos actividad física, etc. ¿Cuántas veces vas al baño al día? ¿Las has contado? Se considera normal hacer de 6 a 8 micciones al día, siendo ninguna o una como mucho por la noche. A partir de ahí habría que valorar sus hábitos y ver cada caso en concreto. Lo que no sería normal, al parecer, y se considera disfunción segura, es ir cada hora o menos a hacer pis; acudir 14 ó 16 veces o levantarse dos o más veces por la noche. Hacer pis por la noche Dado que no se considera normal acudir al baño dos o más veces cuando estamos durmiendo, hay que tener en cuenta también si nos hemos despertado porque tenemos un bebé o un niño pequeño que ha llorado o ha gritado y, ya que nos levantamos, de paso vamos al baño... o si, en cambio, son las ganas de hacer pis las que nos despiertan. En este caso habría que ver qué ocurre porque no es normal. Para intentar evitar ir a hacer pis por la noche podemos: disminuir la ingesta de líquidos beber con normalidad, pero disminuir la cantidad a partir de las seis o siete de la tarde evitar bebidas estimulantes no ingerir en la cena grandes cantidades de líquido o alimentos como sopa, sandía, piña, etc., tampoco tomar infusiones, un vaso de leche o de agua antes de ir a dormir. La vejiga, a partir de 200-300 ml de llenado, empieza a avisar de que hay ganas de hacer pis. Si en ese momento se está trabajando, haciendo algo que no se puede dejar para luego o no hay un baño cerca, la vejiga se acomoda y se aguanta las ganas de hacer pis sin que pase nada. Al parecer, cuando la vejiga llega a 400 ml ya las ganas son más intensas y es cuando normalmente aparece mayor necesidad de vaciarla. Es a partir de los 500 ml cuando ya la vejiga, sí que sí, indica que debemos acudir al baño a orinar y con urgencia.

Calendario miccional

La vejiga puede entrenarse. En estos casos se suele recomendar realizar un calendario miccional:

1. En él se anotarán varios días de la semana, un par de días entre diario y un par de fin de semana o festivo porque nuestros hábitos cambian.

2. Cada día se apunta a qué hora hemos ido a hacer pis y si la cantidad es poca, lo normal o mucha.

3. También anotaremos cada vez que bebemos algo y la cantidad. Así como las veces que se defeca.

Todo tanto por el día como por la noche. Con este calendario vemos que hábitos se tienen, y hay personas que se dan cuentan de que hacen pis cada media hora, otras que igual solo hacen pis durante la mañana y por la tarde no hace nada o al revés, están toda la mañana en el trabajo sin hacer pis y desde que salen se pasan la tarde en el baño. Ninguna pérdida de orina es normal, digan lo que digan tus amigas, tu médico o el anuncio de compresas de turno Eso sí, se suele indicar ir a hacer pis cuando tengan realmente ganas, no por si acaso... Es algo muy frecuente: vamos al baño por si acaso, porque voy a entrar en clase o por si acaso porque voy al médico o porque voy a subirme al coche o a un autobús… pero lo cierto es que se debe evitar ir sin ganas e intentar que pasen dos horas a menos entre micciones, aunque siempre teniendo en cuenta la ingesta de líquidos que se haya realizado. Ojo con el stop pipí Consiste en cortar el chorro de pis cada vez que vamos al baño. Ya que puede alterar la flexibilidad y los reflejos que antes comentábamos; además, de crear más propensión a las infecciones urinarias. Entrenamiento del suelo pélvico Por último, otra cosa que se puede hacer es entrenar nuestro suelo pélvico realizando ejercicios de Kegel. Se trata de contraer y relajar el suelo pélvico para identificarlo y fortalecerlo. En caso de que el suelo pélvico esté debilitado, podría ser una de las causas por las que se va muchas veces al baño, aunque habría muchas otras cosas que valorar.